El tamizaje sistemático de la TB cumple los criterios clásicos del tamizaje (8). Es necesario tener en cuenta los siguientes principios clave a la hora de planificar una iniciativa de tamizaje de la TB:
- Principio 1: El tamizaje de la TB siempre debe hacerse con el propósito de procurar una atención de salud adecuada y, en condiciones ideales, debería ejecutarse donde se disponga de servicios de diagnóstico y tratamiento de la TB de gran calidad. Si una comunidad carece de acceso a una atención de seguimiento adecuada pero se beneficiaría con el tamizaje de la TB, esta situación debería impulsar la inversión de los programas nacionales de TB en servicios de diagnóstico y tratamiento de la enfermedad, con el fin de complementar el tamizaje de la TB.
- Principio 2: El tamizaje debe llegar a las personas que corren el mayor riesgo de presentar TB activa, incluidos los grupos y las comunidades en riesgo alto con una prevalencia alta de TB. La priorización de los grupos en riesgo para el tamizaje se debe basar en la apreciación en cada grupo de los beneficios y daños posibles, la viabilidad y aceptabilidad de la estrategia de tamizaje, el número necesario de personas en las que se debe realizar el tamizaje para detectar un caso de TB y la costo‑efectividad de la actividad. Es necesario evaluar con cuidado los efectos beneficiosos y perjudiciales del tamizaje de la TB en diferentes grupos y en cada población, con el fin de maximizar el bien común y minimizar el daño a las personas. La TB amenaza la salud no solo de una persona afectada, sino también de sus comunidades y de la población en general.
- Principio 3: El tamizaje de la TB debe regirse por los principios éticos establecidos del tamizaje de enfermedades infecciosas, incluida la obtención del consentimiento informado voluntario antes de proceder con su iniciación, y debe respetar los derechos humanos y diseñarse de manera que reduzca al mínimo el riesgo de molestias, dolor, estigmatización y discriminación. El consentimiento informado es un derecho básico y un mecanismo importante de respeto de la autonomía de la persona.
- Principle 4: Principio 4: La elección del algoritmo de tamizaje y diagnóstico se fundamenta en una evaluación de la exactitud del algoritmo en cada grupo en riesgo, además de la disponibilidad, viabilidad y costos de las pruebas de tamizaje. Tras el resultado positivo de una prueba de tamizaje debe confirmarse el diagnóstico de TB antes de comenzar el tratamiento de la enfermedad.
- Principio 5: Se debe lograr una asociación sinérgica del tamizaje de la TB y la prestación de otros servicios sociales y de salud. Lo mejor es reconocer las sinergias durante la elaboración y ejecución de las estrategias de tamizaje en los diferentes grupos destinatarios, que pueden tener diferentes modos de utilización de los servicios sociales y de salud.
- Principio 6: Se prevé que una estrategia de tamizaje maximice la cobertura y frecuencia del tamizaje para alcanzar sus objetivos. Es necesario un seguimiento periódico que fundamente toda modificación de la priorización de los grupos en riesgo, la utilización de recursos, la adaptación de las estrategias de tamizaje y la interrupción del mismo. Este seguimiento incluye la evaluación del riesgo de resultados positivos falsos durante el tamizaje.