5.2.2 Proteína C reactiva

C-reactive protein (CRP)

La proteína C‑reactiva es un indicador de inflamación generalizada que se puede medir en un análisis de sangre. Se cuenta con una prueba en el punto de atención que utiliza sangre capilar obtenida por pinchazo en un dedo, lo cual la hace sencilla, asequible y factible en la atención primaria. El lapso de respuesta entre la obtención de la muestra y el resultado con muchos de los estuches de proteína C‑reactiva es de tres a cinco minutos, lo cual permite una decisión clínica rápida de derivar al paciente para evaluación diagnóstica de la TB o el inicio del TPT. Otra utilidad posible de la proteína C‑reactiva es que puede alertar a los médicos sobre la presencia de otras enfermedades como neumonía bacteriana, bronquitis u otras afecciones infecciosas o no infecciosas (p. ej., linfoma). El personal de salud y los pacientes pueden tener más confianza en los resultados de una prueba bioquímica que en una prueba de detección de síntomas más subjetiva.

El umbral para considerar un resultado como anormal puede diferir según el entorno. Durante la elaboración de las directrices sobre el tamizaje se revisó la evidencia de la aplicación de umbrales de significación de más de 5 mg/l o más de 10 mg/l; se encontró que ambos tenían la exactitud necesaria para detectar la enfermedad por TB. En la actualidad, se recomienda un umbral de significación de más de 5 mg /l, ya que es el umbral más bajo que indica anomalía en muchos entornos clínicos y es el más sensible. Con este umbral de significación, la proteína C‑reactiva tiene una sensibilidad equivalente y una especificidad mayor o equivalente al tamizaje por síntomas en todos los grupos de adultos y adolescentes con infección por el VIH (cuadro 5.2 y véase el anexo B en línea [en inglés] de las directrices sobre el tamizaje). La sensibilidad y especificidad de la proteína C‑reactiva ofrecen una mayor significación clínica que el examen de cuatro síntomas en los pacientes ambulatorios con infección por el VIH que no reciben TAR (proteína C‑reactiva: sensibilidad 89% y especificidad 54%; examen de cuatro síntomas: sensibilidad 84% y especificidad 37%). La proteína C‑reactiva también se puede utilizar en combinación con el examen de cuatro síntomas. Si bien un enfoque paralelo tendrá implicaciones en los recursos debido a la mayor sensibilidad y menor especificidad, los datos examinados para la revisión de las directrices del 2021 respaldan la combinación de un examen positivo de cuatro síntomas, seguido de la proteína C‑reactiva con un umbral de más de 5 mg/l, en especial en las personas que no reciben TAR (véase la sección 5.4 y el anexo B en línea [en inglés] de las directrices sobre el tamizaje).

La proteína C‑reactiva es importante para descartar la TB activa antes de iniciar el TPT, lo cual es esencial en este grupo de la población, en el cual se necesita una prueba con el mayor valor predictivo posible de un resultado negativo. La proteína C‑reactiva con un umbral de más de 5 mg/l tuvo un valor predictivo negativo de 99,8% en los pacientes ambulatorios que no recibían TAR, en un entorno con una prevalencia de TB de 1%.

Accuracy of CRP with cut-of

Para más información, véase el anexo B en línea [en inglés] de las directrices sobre el tamizaje.

Indicador de enfermedad avanzada por el VIH.

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