Enlaces transversales de Book para 5.2.3. Recommended regimens for treatment of drug susceptible pulmonary TB in children
Como ocurre en los adultos, el tratamiento de la TB en la población infantil y adolescente incluye una fase intensiva de dos meses seguida por una fase de continuación de dos a cuatro meses. En la fase intensiva, los bacilos de la TB son destruidos rápidamente para evitar la progresión de la enfermedad, la transmisión y la aparición de farmacorresistencia. En la fase de continuación, se eliminan los bacilos latentes para lograr la curación y evitar la recaída. La elección del esquema de tratamiento de la TB (incluida la inclusión de un cuarto medicamento —el etambutol— en la fase intensiva) depende de la prevalencia de la infección por el VIH y de la resistencia a la isoniacida en el entorno, la gravedad de la enfermedad y la edad.
En la población infantil y adolescente desde los 3 meses hasta los 16 años con TB no grave, se recomienda un ciclo de tratamiento de cuatro meses. Esta recomendación se basa en el ensayo Shorter Treatment for Minimal Tuberculosis in Children (SHINE), un gran ensayo de fase III para evaluar la duración del tratamiento de la TB en niños con TB farmacosensible no grave. El ensayo demostró que un esquema de tratamiento de cuatro meses (dos meses de isoniacida, rifampicina, pirazinamida con o sin etambutol, seguidos por dos meses de isoniacida y rifampicina, 2HRZ[E]/2HR) no era inferior al esquema convencional de seis meses (dos meses de isoniacida, rifampicina, pirazinamida con o sin etambutol, seguidos por 4 meses de isoniacida y rifampicina, 2HRZ[E]/4HR) (86).
En los adolescentes de 12 años o más, el esquema de cuatro meses de isoniacida, rifapentina, pirazinamida y moxifloxacina (HPZM) puede usarse en todos los entornos. Este esquema (2HPZM/2HPM) cumplió los criterios de ausencia de inferioridad en cuanto a la curación de la TB en participantes con confirmación bacteriológica cuando se comparó con el esquema de 2HRZ(E)/4HR en un estudio en el que se incluyó a 63 adolescentes. Los eventos adversos fueron similares en ambos grupos(87).
Las recomendaciones de la OMS sobre las opciones de tratamiento de la TB pulmonar infantil, incluida la TB ganglionar intratorácica, se resumen en el recuadro 5.2.
En el cuadro 5.1 se resumen los esquemas para el tratamiento de la TB pulmonar por grupo etario, gravedad de la enfermedad y epidemiología local.
Cuadro 5.1. Esquemas de tratamiento de la TB pulmonar por grupo etario, gravedad de la enfermedad y epidemiología local
ᵃ El código convencional para los esquemas de tratamiento de la TB utiliza una abreviatura para cada medicamento: isoniacida (H), rifampicina (R), pirazinamida (Z), etambutol (E), rifapentina (P) y moxifloxacina (M). Un esquema consta de dos fases: la intensiva y la de continuación. El número que aparece al frente de cada fase representa su duración en meses. Por ejemplo, el esquema de 2HRZE consiste en el tratamiento con isoniacida, rifampicina, pirazinamida y etambutol durante dos meses.
ᵇ En entornos con prevalencia alta de infección por el VIH o prevalencia alta de resistencia a la isoniacida, se debe añadir el etambutol a la fase intensiva del tratamiento. Los entornos de prevalencia alta de infección por el VIH se definen como aquellos con una prevalencia ≥1% en las embarazadas adultas o ≥5% en las personas con TB. Los PNT de los países establecen los umbrales de la prevalencia baja, moderada o alta de resistencia a la isoniacida.
ᶜ El ensayo SHINE fue un ensayo de ausencia de inferioridad en el que se comparó un esquema de cuatro meses (2HRZ[E]/2HR) con un esquema de seis meses (2HRZ[E]/4HR). Se demostró que el esquema de cuatro meses no era inferior. Por lo tanto, el esquema de seis meses también se puede usar en niños con TB pulmonar no grave si no se ha adoptado el esquema de cuatro meses.
ᵈ Este esquema se aplica independientemente de la prevalencia de infección por el VIH y la prevalencia de la resistencia a la isoniacida.
ᵉ Este esquema se aplica a los adolescentes mayores con independencia de la gravedad de la enfermedad, la prevalencia de la infección por el VIH y la prevalencia de la resistencia a la isoniacida.
ᶠ Este esquema se aplica a los adolescentes mayores, independientemente de la gravedad de la enfermedad, la prevalencia de la infección por el VIH y la prevalencia de la resistencia a la isoniacida, salvo en las personas que pesan menos de 40 kg y los adolescentes con infección por el VIH con una cifra de linfocitos CD4 inferior a 100/mm³.