Figura 2.8. Algoritmo para el tamizaje de la TB en la población infantil con infección por el VIH con síntomas
En los menores de 10 años con infección por el VIH, SE debe realizar el tamizaje de la TB en cada encuentro con un trabajador de atención de salud, para detectar la presencia de tos actual, fiebre, ganancia ponderal insuficiente o contacto estrecho con una persona con TB (véase la figura 2.8). En la revisión sistemática realizada para las directrices de la OMS sobre el tamizaje del 2021 se mostró que la presencia de cualquiera de estas condiciones tiene una sensibilidad de 61% y una especificidad de 94%. A los niños con resultados positivos en este tamizaje se les debe hacer una evaluación diagnóstica adicional de la enfermedad por TB (25). En la población adolescente de 10 a 19 años, el tamizaje se debe realizar como en la población adulta.
La detección de la TB puede ser difícil en la población infantil con infección por el VIH. Incluso los niños mayores, de los que se espera que tengan una enfermedad por TB más típica de los adultos si tienen una infección por el VIH, presentan con frecuencia una enfermedad extrapulmonar y síntomas atípicos (30). Los trabajadores de atención de salud deben mantener una clara sospecha clínica de TB ante cualquier niño con infección por el VIH, incluso en ausencia de los signos y síntomas clásicos de la TB, especialmente en las zonas con una carga alta de TB.